Puro inconsciente

Si me pongo a leer acerca de la teoría psicoanalítica, el miedo me embarga porque somos SOLO inconsciente. La parcela consciente de nuestra vida es puro teatro, es la representación que hace nuestro verdadero "yo" de cara a las represiones sociales, las reglas morales. Dicho esto, ¿yo me conozco? ¿Quién soy yo?

El inconsciente tiene ausencia de cronología, no reconoce pasado ni futuro, tan solo el presente. Trae aquí todos los temores y deseos que ya han existido y no nos libera de ellos. ¡Qué confusión! Tanto anhelo y miedo junto... Supongo que por ello son tan excéntrica.
Para el inconsciente no existe el concepto de contradicción. No cuestiona los sucesos antitéticos. "Los conscientes" nos pasamos la vida echando en cara a la gente sus contradicciones, cuando éstas son nnaturales y necesarias. Yo soy el espíritu de la contradicción pero me paso la vida negándolo y justificándome de cara a lo social y "bien visto".

Por otro lado, utiliza el lenguaje simbólico. En ocasiones yo me hablo a mí misma con símbolos que luego tengo que interpretar. Según la teoría psicoanálitica, las representaciones del inconsciente, tienen la particularidad de incidir de manera decisiva en la vida psíquica del sujeto -véanse las neurosis, las cuales tengo para dar y regalar- y que son muy eficaces. Para los psicoanalistas, los síntomas propios de la neurosis son el efecto de algo que el sujeto no conoce pero que es tan eficaz como para contrariar a la propia voluntad.

No quiero produciro risa, compañeros, pero yo soy especialmente más inconsciente que voluntad. Si reconozco esto, soy capaz de explicar muchas cosas.

Aconsejaría restar importancia a la manipulación que nos da lo consciente y "escuchar" la verdad que nos indica el inconsciente.
Vivan los lápsus y los sueños.