Era yo
Y yo
nacía
Y mamaba del
pecho,
Comía de todos
los maizales,
Escuchaba
cuentos de todas esa bocas.
Me
vestía de las pieles más vistosas
Y
Te conocí en ese verbo, el que vomito
Y me desnudé. Al principio, lo justo.
Luego desaprendí lo que supe antes.
Y me moría de
hambre.
No hallaba la teta.
Y yo moría.
No estaba.