Rotación de belleza

"[…] Schopenhauer, que decía que la música es voluntad  pura"

Me declaro música.

"Dos veces muere el que, a voluntad de otro, muere"


Esta jodida música que no para de abrirme, felizmente, las ventanas del pecho.


 Me aterra esta incomprensible capacidad de resucitarme.

Siempre,
cada vez,
invariablemente.

Un milenario instante apenas
con la frente agachada:
caminar bajo la lluvia,
torcer el gesto,
maldecirlo todo.
Ser ciega,
gris,
inclemente,

impía

impía

impía.


Airada.
Puro colmillo.


Y todas las mañanas
de cualquier enero,
sin contar con ello,
y sin
voluntad;
pese a ti,
pese al mundo,
amaneces renacida
y tienes el cuerpo
lleno de mariposas
y los rizos
llenos de flores.
Y música al caminar.
Y melodías en tu cuaderno.

 Oh, el sol.
Sonreír,
bendecirlo todo,
lúcida,
flexible,
librepensadora,
mansa.

Impía,
impía
impía.

Puro corazón.


(¡Vida, vida, vida, te quiero!)